Testimonios

Cuando conocí a Mamen llevaba viviendo un año disfrazada, porque había contratado a una asesora de imagen que me había hecho un cambio radical de look. Me había puesto el pelo negro, liso, corto. Me había disfrazado literalmente, porque yo quería parecer más profesional y vivía completamente una vida falsa. Yo me sentía falsa, con ropa que no me identificaba.

De hecho, cuando empecé a trabajar con Mamen tenía una fuerte crisis de identidad, porque no sabía quién era, ni cuál era mi estilo, ni nada. Gracias a ella he encontrado mi estilo. He encontrado mi voz. Me siento cómoda vistiendo cada mañana. Lo mejor, me ha ayudado a acomodarme el armario. No necesito cinco mil cosas, con veinte prendas puedo ir moviéndolas entre ellas y siento que voy cada vez con algo nuevo, ¡Y es algo que me encanta!

Tras pasar por el programa de Mamen me siento mucho más empoderada y con mucha más claridad. Me siento bien cada mañana cuando me visto, y además sé que ponerme en cada momento, según lo que quiera atraer ese día. Si quiero parecer más cercana, si quiero parecer un poco más distante o profesional, si quiero notarme con mucho poder. Es un mundo entero que no conocía antes de pasar por su Programa.

Mi vida cambió al 100% al pasar por este Programa. De hecho, es la mejor inversión que he hecho en mi vida. Y creo que todas las chicas del grupo, ha sido la frase que hemos utilizado. Yo he hecho muchos otros grupos, he trabajado con mucha otra gente y nunca he sentido esta satisfacción de decir ¡Madre mía! ¿Por qué no lo encontré antes? Porque la verdad es que yo me siento empoderada, feliz, me veo guapa cada mañana, toda la gente me lo nota, que es lo mejor. Y básicamente, me siento feliz.